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¿Señora de que color quiere que le pintemos las paredes?
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Pues blancas lo quiero todo blanco – siempre he pensado que el color blanco es
el más limpio para estos casos.
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Perfecto, empezaremos mañana hoy iré a comprar todo el material y mañana a las
ocho de la mañana estoy aquí.
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Gracias
Siempre
he sido una mujer de pocas palabras, el propietario de la casa me dio la opción
de escoger, si pintaba yo dos meses de carencia y si no empezaba a pagar desde
el primer mes. Me pareció un trato justo. Y como tenía claro que no quería
florituras en las paredes pues tuve claro que trato hacer.
Es
la tercera vez que me mudo este año, tengo una misión que cumplir y hasta que
no la concluya me tendré que mudar unas cuantas veces más. Soy viuda, mi marido
era policía, le mataron cuando quiso ser más listo que el último hombre al que
tuvo que detener. Y no contentos con eso mataron a mis dos hijos, así porque
si, por quitar dos vidas inocentes, así que como a mí ya no me queda otra cosa
en la vida más que la sed de venganza pues en eso estoy.
De
momento he matado a tres hombres de la banda que asesinó a mi familia, soy lo
que se podría decir una asesina en serie, tras los múltiples asesinatos
investigué todo lo que pude sobre esa gente, para ello me tuve que tirar a
medio cuerpo de policía de Nueva York, la pobre viuda me llamaban, pero a mí ya
todo me da igual, y fueron polvos bien invertidos conseguí los nombres de todos
los integrantes de la banda, traficantes de droga, se encuentran dispersos por
todo el país de ahí las mudanzas.
Mi
móvil es muy sencillo, llego a la ciudad, alquilo una casa, la pinto de blanco,
me acerco a la gente del pueblo, aprendo movimientos, y en cuánto localizo a mi
presa me la ligo, la seduzco y cuando viene a casa la mato, siempre del mismo
modo, se desangran y yo pinto las blancas paredes con su sangre, en ellas
escribo cosas que mis hijos me decían, palabras que no sabían pronunciar,
recuerdos de cuando eran pequeñitos y eso me consuela. Hago un bien a la
comunidad, quito de la circulación un traficante.
¿Qué
porqué no me pillan? Pues porque soy discreta, no hago mucho ruido, todos los
hombres a los que he matado están casados así que como hay pruebas claras de
que estaban con otra mujer en la cama los de su banda prefieren no hacer mucho
ruido, el tema es el siguiente, yo lo mato durante el acto, después pinto las
paredes, recojo mis cosas y justo antes de salir, hago una llamada desde el
teléfono del muerto a algún miembro de su banda, y ellos se encargan de hacer
desaparecer el cuerpo, pintan las paredes y yo mientras ya estoy buscando a mi
próxima victima. Llamo al casero y le digo que me he tenido que marchar
precipitadamente, le pago un mes más por las molestias y todos contentos.
Me
doy cuenta de que cada vez corro más riesgos y de que algún día me pillaran
pero no tengo miedo, en realidad me da igual vivir o morir así que hasta que
pueda seguiré limpiando la capa de la tierra de escoria y cuando muera me
reuniré con mi familia en una bonita casa en el cielo con todas las paredes blancas.